La idea de contar con un medio virtual para
complementar las clases presenciales, que suelen ser acotadas en tiempo, logra
un plus cuantitativo en relación a la cantidad de información que se les puede
proporcionar a los alumnos. Incluyendo noticias de actualidad relacionadas con
la temática trabajada en clase puede resultar más interesante para los alumnos
y así lograr un mayor compromiso con la materia.
Además de brindarles información, el uso de los
medios virtuales puede propiciar la participación de los alumnos, generando
debates y abriendo espacios donde cada
uno pueda ir aportando lo propio.
Podemos ubicar dos vías, por un lado la
unidireccional, donde el docente sube contenido para que los alumnos se
informen, lo lean, se interesen. Por otro lado la vía de la retroalimentación,
donde los alumnos tienen un rol más activo, pueden participar de las encuestas,
crear contenidos, debatir, proponer, etc.
Creo que es interesante incentivar a que los alumnos
comenten en los espacios virtuales y aprovechar las posibilidades que nos
brinda la web 2.0 para poder generar un ida y vuelta.
Antes se consideraba que el docente debía enseñarles
a sus alumnos, el docente era el que poseía el saber y los alumnos debían
incorporar dichos conocimientos. Esta conceptualización ya es antigua, sabemos
que en muchas ocasiones los alumnos saben más que nosotros, o quizás no más,
pero si otras cosas, ellos pueden aportar a los conocimientos de todos los
integrantes de la clase, incluido el docente.
Lo interesante de las TIC es que nos permiten pensar
la educación desde otro paradigma. Como los medios de comunicación ahora no son
unidireccionales, sino que se nutren constantemente de sus televidentes
mediante las redes sociales, y la construcción de conocimiento actual se realiza
entre todos, compartiendo ¿por qué no pensar la educación de la misma forma?
Permitirnos que los alumnos nos enseñen, abrir
espacios donde esto sea posible, invitar a nuestros alumnos a que construyan,
creen. Creo que es la única manera en que el salto sea cualitativo además de
cuantitativo, y así no solo lograr incluir mayor información a nuestros
alumnos, sino permitirnos atravesar una experiencia transformadora tanto para
los alumnos como para los docentes.
